Concurso de restauración de Porsche Classic
El interés de Porsche por el futuro solo es comparable con su pasión por el pasado. Por eso, los Porsche Center de Canadá pasaron el último año preparando la segunda edición del Concurso de Restauración de Porsche Classic. Una vez más, el reto consistía en restaurar completamente cualquier modelo clásico de Porsche para devolverlo al estado en el que salió de la fábrica. Esta competencia sirve para demostrar la experiencia y la dedicación de cada Porsche Center, además de estrechar la relación entre los equipos y la extensa familia Porsche en Canadá.
En esta ocasión participaron 12 Porsche Center canadienses, que restauraron versiones Coupé y Cabriolet del 356, junto con una amplia variedad de modelos 911 refrigerados por aire. Se les encomendó no solo la tarea de buscar los autos y devolverles su antiguo esplendor, también de documentar cuidadosamente el proceso y compartirlo a través de varios canales de comunicación.
Al final del plazo previsto, todas las candidaturas fueron enviadas al Centro de Recambios y Distribución de Porsche en Mississauga (Ontario), donde también está el centro de formación para los técnicos de Porsche. Allí, un jurado de expertos procedentes de la región canadiense del Porsche Club of America y de Porsche Canadá, entre los que se encontraba el Presidente y Director General, Marc Ouayoun, evaluaron las candidaturas en función de su restauración técnica y el estado del vehículo, así como el material de marketing y comunicación adjunto.
«El objetivo de este proyecto es mostrar el conocimiento de los clásicos y la capacidad de restauración de nuestros excelentes Porsche Centers en Canadá», dijo el Gerente de Posventa de Porsche Canadá, Rajat Thukral, quien supervisó la competición. «También permite que los equipos se apasionen por la marca y por su rica herencia».
Conocimientos sobre clásicos y habilidad en la restauración
En el concurso hubo diferentes proyectos de restauración, desde el complejo trabajo sobre un 356 B Coupé de 1964 por parte del Porsche Center Oakville, hasta la decisión de Pfaff Porsche de dar nueva vida a un 993 con mucho kilometraje. Este 911 Carrera de color plata Polar había sido vendido originalmente por Pfaff a mediados de la década de 1990 y, en el momento de su restauración, llevaba con orgullo más de 200 000 kilómetros en su odómetro.
Otros modelos únicos fueron un 930 Turbo acabado en un atrevido azul, perteneciente al catálogo de individualización Paint To Sample del Porsche Center Londres, un 911 E de 1969 con ‘capó largo’, al que Mark Motors Porsche había dedicado más de 2200 horas de trabajo cuando finalizó la competencia, y un homenaje a la participación oficial en los rallyes de mediados de la década de 1980 con el sorprendente 911 Safari de Porsche Center Vancouver, con la suspensión elevada y la tapicería de tartán Porsche Exclusive.
En un proceso de evaluación increíblemente difícil, los jurados tuvieron en cuenta todos los elementos de cada auto, desde las reconstrucciones del motor y la caja de cambios hasta los sistemas de escape, el cableado, las luces de freno y la carrocería. La competencia estaba dividida en dos categorías, 356 y 911, con premios para ambas. También fue reconocido el Porsche Center que mejor comunicó el mensaje del proyecto de restauración y fue otorgado un ‘Premio a la Pasión’ al equipo que prestó mayor dedicación a la tarea.
Tres modelos 356 en la competencia
«Fue emocionante tener tres 356 como parte de la competencia», dijo Alexander Pretsch, Director de Posventa de Porsche Canadá. «Nunca es un trabajo sencillo restaurar un vehículo antiguo; cuantos más años, más difícil. Una vez que empiezas a profundizar, nunca sabes lo que vas a encontrar. Me sorprendió lo que nuestros Porsche Center fueron capaces de hacer”.
Al final, fueron reconocidos los extraordinarios esfuerzos que realizó el Porsche Center Saskatchewan en la restauración de un 356 B Cabriolet de 1960 con números coincidentes de motor y chasís, así como un raro techo rígido a juego. En la categoría del 911, los máximos honores fueron para el Porsche Center Lauzon por su impresionante trabajo en un igualmente inusual 911 Targa CE de 1986, una edición conmemorativa del momento en que la producción del 911 alcanzó las 250 000 unidades. «Esta auto parece casi nuevo y es una delicia conducirlo», dijo Thukral sobre este serie G de edición limitada. «La atención al detalle, tanto por dentro como por fuera, es increíble».
Después de que el Porsche Center Toronto North fuera galardonado por sus esfuerzos en la categoría de Marketing y Comunicación y de que el extraordinario homenaje al Safari del Porsche Center Vancouver obtuviera el Premio a la Pasión, solo quedaba coronar a un ganador absoluto. Tras horas de minuciosa deliberación, y con el Targa del Porsche Center Lauzon electo subcampeón, el triunfo fue para el Porsche Center Saskatchewan por sus extraordinarios esfuerzos en el 356 B, un auto que Ouayoun describió como «una inmaculada cápsula del tiempo».
«Este concurso es realmente una forma de mostrar la destreza, la calidad y el saber hacer de nuestros artesanos y nuestros técnicos, que ponen mucha energía y pasión en estos proyectos», continúa Ouayoun. «Cuando vemos los resultados, solo podemos estar orgullosos de la increíble habilidad que tenemos en la red Porsche. Gracias a todos nuestros Centros Porsche por recrear la historia con estos automóviles».
Fuente: newsroom.porsche.com